11 Platillos típicos de Suecia

La Semla es uno de los postres más tradiciones de Suecia. Consiste básicamente en un delicioso y esponjoso panecillo que se corta en su sección superior para posteriormente rellenarse haciendo uso de una muy sabrosa crema de leche, pasta de almendras y nata.

La sección cortada del panecillo se utiliza como tapa. Una vez que se encuentra listo, se le coloca un poco de azúcar en polvo por arriba. Es una excelente merienda, su sabor dulce y textura suave lo convierten en una merienda ideal.

Es bastante habitual comerlo a mitad de la tarde acompañado de una taza de café o té. Muchas personas disfrutan sumergirlo en un poco de leche caliente antes de comerlo. Sin duda se trata de un aperitivo muy sabroso que no puedes dejar de probar al visitar Suecia.

También conocida como Ärtsoppa med pannkakor, la sopa de guisantes y panqueques es uno de los almuerzos familiares más característicos de Suecia. Existe una tradición que indica que debe comerse los días jueves.

Los orígenes de esta costumbre no están muy claros, por lo que son bastante debatidos. A causa de ella, es bastante frecuente encontrarla como platillo principal en muchos restaurantes suecos los jueves.

Como indica su nombre, se trata de una sopa de guisantes que se complementa con unos deliciosos panqueques con mermelada y crema. Es una comida muy sabrosa y completa, por lo que probarla es muy recomendable.

Conocido localmente como Knäckebröd, este pan de centeno horneado, plano y de gran rigidez es uno de los platillos típicos de Suecia más populares entre los locales. Para su preparación, se introduce al horno a una sorprendente temperatura de 400°C.

Es una comida muy simple. Habitualmente se la sirve acompañada de mantequilla y una rebanada de queso. Se trata de un platillo muy accesible que puede encontrarse en muchos supermercados en todo el país.

También es muy rápido de comer, por lo que es habitual que se consuma al desayuno o como un acompañante para otros platillos. No puedes perderte la oportunidad de probarlo, aunque es muy importante recordar que es bastante duro.

El Sill es una comida típica de Suecia bastante reconocida. La preparación consiste en arenque encurtido acompañado de patatas, cebollín, huevos hervidos, trozos de queso, crema agria y el ya mencionado pan crujiente (Knäckebröd).

Es muy fácil encontrarlo en cualquier supermercado, por lo que es una comida de muy fácil acceso. Se consume mayormente durante el verano, es un platillo muy sabroso y fácil de digerir. Si prefieres un poco de variedad, también puedes encontrar los arenques en presentaciones ahumadas o fritas.

Localmente conocido como Graval Lax, este platillo tradicional sueco consiste en trozos de salmón que se colocan a marinar y se introducen al refrigerador durante algunos días.

Para comerlo, es habitual que se le coloquen sobre una rebanada de pan y se complementen con ensalada. Generalmente se le acompaña con un poco de una particular salsa fría y un poco dulce que se prepara utilizando mostaza y eneldo.

Es una preparación muy conocida en toda Suecia. Puede encontrarse como entrante para platillos más grandes en bastantes restaurantes. Es sin duda muy recomendable degustarla.

Conocido localmente como Kanelbullar, estos deliciosos panecillos de canela son tan populares que incluso tienen su propio día nacional celebrado el 4 de octubre.

El acompañante más habitual para este delicioso aperitivo es una taza de café. Su exquisito sabor lo han hecho muy popular en todo el mundo, por lo que quizás los hayas probado antes.

Sin embargo, la preparación original es extremadamente deliciosa, por lo que definitivamente merece la pena probarla. Son muy económicos y fáciles de encontrar en toda Suecia, por lo que no dudes en probarlos si tienes la oportunidad.

Las albóndigas Suecas se encuentran fácilmente entre los platillos típicos más conocidos del país. Los locales las llaman Köttbullar. Son muy económicas y se sirven prácticamente en cualquier establecimiento de comida del país.

Sus acompañamientos más populares son la salsa de arándanos, el puré de patatas y los guisantes. No obstante, puedes encontrar versiones de este platillo preparadas con pescado en lugar de carne, o acompañadas con distintas salsas.

La región de Småland, ubicada al suroeste de Suecia, es reconocida por su delicioso pastel de queso. Localmente conocido con el nombre de Smålandsk Ostkaka, es un platillo tan popular que también tiene su propio día del año para conmemorarlo, el cual se celebra el 14 de noviembre.

Se lo suele servir caliente y acompañado de un poco de nata, mermelada, fruta fresca o helado. Una de las cualidades más atractivas de este postre es que permite que los cocineros hagan fluir mucho su creatividad.

Por ello, podrás encontrar una variante diferente de este platillo en cada panadería que visites. Su costo es muy accesible, por lo que si deseas probar un delicioso postre para reponer fuerzas mientras conoces Suecia, es la opción ideal.

Los perros calientes se encuentran entre los principales protagonistas de los puestos de comida callejera en Suecia. Se consumen en todo momento, desde celebraciones y reuniones, hasta almuerzos informales entre amigos o como aperitivo.

Son un bocadillo muy económico para merendar a media tarde, por lo que resulta muy aconsejable comerlos. Además, son una preparación muy versátil, por lo que podrás encontrar numerosas variantes de este platillo. ¿Alguna vez has probado perros calientes con puré de papa o camarones?

Los suecos son grandes aficionados de este tipo de platillo. Se trata de una tradición bastante antigua que puede remontarse hasta el siglo XV. En aquellos tiempos, era habitual utilizar trozos de pan de gran tamaño a manera de platos para contener distintos tipos de alimentos.

Algunos de los principales ingredientes que se utilizan en la preparación de los sándwiches abiertos suecos son los camarones, la lechuga, el tomate y los pepinos, los cuales se acompañan habitualmente con una deliciosa salsa de eneldo.

Si se te antoja un aperitivo dulce, no hay nada mejor que la torta sueca, también llamada Prinsesstårta. Esta preparación consiste habitualmente en capas de delicioso y esponjoso bizcocho que se complementan con nata montada y crema pastelera.

Además, su superficie se recubre con mazapán, por lo que recibe un acabado bastante liso y redondeado. Una de las principales particulares de esta receta es que el mazapán utilizado para recubrirla suele tener una coloración verdosa.

Es un postre muy dulce, accesible y fácil de encontrar en cualquier panadería, pastelería o puesto de comida en Suecia. Su suave y esponjosa textura resulta sumamente agradable, por lo que sin lugar a dudas te encantará.