Las 8 Ciudades Más Antiguas En Bélgica

Llamada como “Venecia del norte” y una de las localidades más hermosas de Europa. La ciudad de Brujas es un ejemplo medieval excepcionalmente que se ha sabido conservar. Sus calles, entrelazadas por canales le han dado a la ciudad el apodo de “Venecia del norte”, cuentan con espacios propios de cuento de hadas. No es raro que muchos la estimen como la ciudad más antigua de Europa y que su casco histórico, lleno de edificios de excelente valor arquitectónico, la han hecho parte como Patrimonio de la Humanidad.

Cuenta con edificios tan importantes como el ayuntamiento el cual cuenta con un diseño gótico y la extravagante Basílica de la Santa Sangre. La entrada del ayuntamiento, pertenece al año 1376, es de hermosura excepcional, en su interior sobresale la Sala Gótica, dotada de una prestigiosa bóveda policromada.

Es básicamente una ciudad medieval, la cual es caracterizada por su preciosidad típicamente antigua. Particularmente es más hermosa que Brujas, gracias a que su centro histórico es muy bonito, el cual le da a la ciudad vida y personalidad.

Si vienes a esta ciudad no dudes en visitar la plaza mayor, la Korenmarkt, y sus sitios emblemáticos como el popular puente de San Miguel, donde disfrutaras de una excelente vista de las tres torres más emblemáticas de Gante, la hermosa iglesia de San Nicolás, la única catedral de San Bavón y el tradicional Campanario del ayuntamiento. Este último, llamado como Torre Belfort, el cual fue fundado en el siglo XIV un monumento que embellece a la ciudad con sus 64 metros de elevación.

Es la capital de Bélgica, y una de las su ciudad más antiguas, grande e importante del país, y además es el centro de las Instituciones de la Unión Europea. Es una localidad cosmopolita y además mantiene su estilo cultural, con edificios medievales e inmuebles del art noveau, y que promete muchos planes interesantes para hacer de la capital la mejor. Si deseas visitarla no te pierdas tomar un itinerario de Bruselas que dura alrededor de dos días. La capital belga hospeda muchos sitios de interés. Uno de sus principales iconos es la encantadora Grand Place, el cual es parte del Patrimonio Mundial por la UNESCO, con sus construcciones de estilo gótico y barrocos únicos.

Es llamada como la capital mundial de los diamantes. A parte de ser la segunda ciudad más grande de toda Bélgica, es una de las más antiguas por contar con inmuebles antiguos y su puerto, que es uno de los más significativos del continente, recuerdo de la trascendencia financiera que tuvo en el siglo XV. Entre las visitas indispensables, sobresale la triangular plaza mayor (Grote Mark), el centro antiguo rodeado de inmuebles renacentistas, la bella catedral de Nuestra Señora siendo esta el inmueble más religioso de todo el país, el popular castillo, y la bella Casa Museo de Rubens, donde habito el pintor Rubens durante 25 años.

Considerada como una de las ciudades universitarias más reanimadas de Bélgica, se encuentra a solo treinta minutos en tren desde el centro de Bruselas, es una de las ciudades universitarias más significativas de Flandes, lo que se nota en la formación de su población es que es predominantemente joven. Su famosa Universidad, que llamo la presencia de personajes como Erasmo de Rotterdam, en el año 1425. Como atractivos especiales cuenta con la plaza mayor, el popular centro neurálgico ciudadano, que hospeda inmuebles tan célebres como la hermosa iglesia de San Pedro o el tradicional ayuntamiento gótico, con su extraordinaria fachada llena de importantes personajes de la Biblia y de la ciudad histórica, en una colección de 230 estatuas.

Es llamada como la “hija del Mosa” aparte de ser una de las ciudades antiguas es una de las más bellas pero menos visitadas de Valonia. Cuenta con una población de 20.000 habitantes está rodeada por un río y envuelta entre rocas, ofreciéndoles ese atractivo especial. A pesar de su tamaño pequeño cuenta con una historia extensa.  La Colegiata de Notre Dame, cuenta con una cúpula en forma de bulbo, fue un centro románico en sus inicios, reconstruida llegando al estilo gótico que tiene actualmente.

Se encuentra en la confluencia de los ríos Sambre y Mosa, en un recinto reforzado de enorme interés histórico, envuelta por un paisaje natural único.  El edificio más grandioso es su ciudadela, con sus orígenes merovingios, ubicado en el montículo rocoso que sella la unión de ambos ríos. Estuvo dirigida por los condes de Flandes a partir el siglo XII, pasó por manos de naciones diferentes, hasta sufrir daños durante las dos guerras mundiales.

La bella catedral de Saint-Aubain es otro de los inmuebles que hay que visitar si vienes a la ciudad de Namur. Es un templo de estilo barroco edificado a mediados del siglo XVIII, con un interior extenso que hospeda un extraordinario púlpito esculpido en madera. La visita de la ciudad se hace encantadora y si tienes bastante tiempo para visitar con calma.

Esta ciudad ha sido testigo fiel de la batalla de las Ardenas, es una de las ciudades antiguas de Bélgica por tener un origen medieval, situado en la región valona, que armoniza una rica historia con su preciosidad natural, excelente gastronomía y exquisita cerveza. La ciudad ofrece el mejor museo dedicado a la batalla de las Ardenas. Distribuidos en tres plantas, con alrededor de  1.500 metros cuadrados llenos de diferente material y huellas de la confrontación.

En la localidad, sobresale como componente clave su castillo medieval, ubicado en la parte superior de la colina originada por el meandro del río Ourthe, con principios que se remontan al siglo IX. Este popular castillo cuenta con un característico fantasma, según una leyenda es la condesa Berta, que se puede oír en su interior, esto lo hizo convertirse en un símbolo especial de la ciudad.